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El significado del diezmo según la Biblia Católica

¿Qué es el diezmo?

El diezmo es una práctica religiosa que consiste en la donación del 10% de los ingresos a la iglesia. Esta práctica se encuentra en la Biblia tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento.

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El diezmo en el Antiguo Testamento

En el Antiguo Testamento, el diezmo se encuentra en Levítico 27:30-32: «Todo diezmo de la tierra, tanto de la semilla de la tierra como del fruto de los árboles, es del Señor; es una cosa consagrada al Señor».

El diezmo se usaba para mantener el templo, los sacerdotes y los levitas. También se usaba para ayudar a los pobres y los extranjeros.

El diezmo en el Nuevo Testamento

En el Nuevo Testamento, Jesús habló del diezmo en Mateo 23:23: «¡Ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas! Porque diezman la menta, el eneldo y el comino, y descuidan lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto es lo que debían practicar, sin descuidar aquello».

Jesús no abolió el diezmo, pero enfatizó la importancia de la justicia, la misericordia y la fe por encima de la práctica del diezmo.

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¿Deben los católicos diezmar?

La Iglesia Católica no exige el diezmo, pero lo anima como una práctica de generosidad y apoyo a la iglesia y a los necesitados.

Los católicos pueden donar su tiempo, talentos y recursos financieros a la iglesia y a las obras de caridad. La donación del diezmo puede ser una forma de vivir la generosidad y la caridad.

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¿Qué pasa si no puedo diezmar?

La donación del diezmo es una práctica voluntaria. Si un católico no puede dar el 10% de sus ingresos, puede donar lo que pueda y seguir siendo generoso y caritativo.

La iglesia valora todas las donaciones y la contribución de tiempo y talentos de sus miembros.

El diezmo es una práctica bíblica que puede ser una forma de vivir la generosidad y la caridad. Los católicos no están obligados a diezmar, pero pueden hacerlo como una forma de apoyar a la iglesia y a los necesitados.

La generosidad y la caridad son valores fundamentales del cristianismo, y la donación del tiempo, talentos y recursos financieros puede ser una forma de vivir estos valores en la vida cotidiana.