La enseñanza de Jesús es una guía para la vida que ha inspirado a millones de personas en todo el mundo. Una de sus enseñanzas más poderosas se encuentra en la historia del adulterio y la frase «el que esté libre de pecado, que tire la primera piedra» (Juan 8:7). En este artículo, exploraremos el significado de esta enseñanza y su relevancia en la actualidad.
¿Qué dice la Biblia sobre el adulterio?
Antes de profundizar en la historia del adulterio, es importante entender lo que la Biblia dice sobre el tema. En la ley judía, el adulterio era considerado como un pecado grave y la pena era la muerte. La ley también establecía que los dos participantes en el acto debían ser castigados de igual manera.
La historia del adulterio en la Biblia
La historia del adulterio se encuentra en Juan 8:1-11. En ella, los fariseos y los maestros de la ley llevaron a una mujer que había sido sorprendida en adulterio ante Jesús. Le preguntaron a Jesús si debían apedrearla, como lo establecía la ley. Jesús respondió: «El que esté libre de pecado, que tire la primera piedra». Los fariseos se fueron uno por uno, dejando sola a la mujer.
Jesús le dijo a la mujer: «Yo no te condeno. Vete y no peques más».
¿Qué significa «el que esté libre de pecado, que tire la primera piedra»?
Esta frase significa que nadie es perfecto y todos hemos cometido errores en algún momento de nuestras vidas. Jesús no estaba diciendo que el adulterio no era un pecado, sino que todos somos pecadores y no tenemos el derecho de juzgar a los demás. En lugar de condenar a la mujer, Jesús la perdonó y la instó a cambiar su comportamiento.
La relevancia de la enseñanza de Jesús en la actualidad
La enseñanza de Jesús es más relevante que nunca en la actualidad. Vivimos en un mundo donde la gente tiende a juzgar a los demás sin conocer toda la historia. La frase «el que esté libre de pecado, que tire la primera piedra» nos recuerda que todos tenemos nuestras propias debilidades y que debemos ser compasivos y perdonar a los demás.
La enseñanza de Jesús sobre el adulterio y la frase «el que esté libre de pecado, que tire la primera piedra» es una guía poderosa para la vida. Nos recuerda que debemos ser compasivos y perdonar a los demás, en lugar de juzgarlos. En un mundo donde la gente tiende a juzgar a los demás sin conocer toda la historia, esta enseñanza es más relevante que nunca.