La Biblia es un libro sagrado que ha sido interpretado de muchas maneras a lo largo de los siglos. Una de las palabras que aparece con frecuencia en este libro es «guardar». ¿Qué significa realmente «guardar» según la Biblia? En este artículo, exploraremos el verdadero significado de esta palabra y su aplicación en nuestras vidas.
Guardando la Palabra de Dios
En el Salmo 119:11, encontramos el siguiente versículo: «En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti». Aquí, el salmista nos muestra que guardar la Palabra de Dios es importante para evitar caer en el pecado. Pero, ¿cómo podemos guardar la Palabra de Dios en nuestros corazones?
Una forma es mediante la meditación diaria en la Biblia. Al leer y reflexionar sobre los versículos, podemos incorporar la Palabra de Dios en nuestras mentes y corazones. También podemos memorizar los versículos para tenerlos a mano cuando los necesitemos.
Guardando los mandamientos de Dios
En Éxodo 20:3-17, encontramos los diez mandamientos que Dios dio a Moisés. Estos mandamientos son un conjunto de leyes y principios que Dios nos da como guía para vivir una vida justa y santa. Guardar los mandamientos de Dios significa obedecerlos y seguirlos en nuestra vida diaria.
Jesús también nos habla de la importancia de guardar los mandamientos en Juan 14:15: «Si me amáis, guardad mis mandamientos».
Aquí, Jesús nos muestra que guardar los mandamientos es una forma de demostrar nuestro amor por Él.
Guardando nuestros corazones
En Proverbios 4:23, encontramos el siguiente versículo: «Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida». Aquí, el escritor nos muestra la importancia de cuidar nuestros corazones y evitar que se contaminen con cosas malas.
Guardar nuestros corazones significa tener cuidado con lo que permitimos entrar en ellos. Debemos evitar la envidia, el odio, la amargura y otras actitudes negativas que pueden dañar nuestra relación con Dios y con los demás.
Guardando nuestra fe
En 2 Timoteo 1:14, encontramos el siguiente versículo: «Guarda el buen depósito por medio del Espíritu Santo que mora en nosotros». Aquí, Pablo nos muestra la importancia de mantener nuestra fe en Cristo y no permitir que se debilite o se pierda.
Guardar nuestra fe significa confiar en Dios incluso cuando las cosas parecen difíciles. Significa seguir creyendo en Él y en su amor y gracia, incluso cuando no podemos entender todo lo que está sucediendo en nuestra vida.
Guardar según la Biblia implica meditar en la Palabra de Dios, obedecer sus mandamientos, cuidar nuestros corazones y mantener nuestra fe en Cristo. Al hacer estas cosas, podemos crecer en nuestra relación con Dios y vivir una vida que le honre.
Recuerda que guardar no es solo una cuestión de cumplir una lista de reglas, sino una actitud de corazón que nos lleva a buscar a Dios y a vivir según sus principios en todo momento.