La Hora Tercera en la Biblia tiene un significado especial dentro de la tradición cristiana. En este artículo, exploraremos su relevancia espiritual y cómo se ha interpretado a lo largo de la historia. Además, hablaremos sobre su relación con otros conceptos bíblicos, como el Espíritu Santo y la Resurrección de Jesús.
¿Qué es la Hora Tercera?
La Hora Tercera es una medida de tiempo que se utilizaba en la antigüedad para dividir el día en partes iguales. En la tradición judía, la Hora Tercera correspondía aproximadamente a las 9 de la mañana. En la tradición cristiana, se ha asociado con un momento específico del día: el momento en que Jesús fue crucificado.
La Hora Tercera en la crucifixión de Jesús
Según los evangelios, Jesús fue crucificado a la Hora Tercera del día. En Mateo 27:45-46, se describe cómo «desde la hora sexta hasta la hora novena hubo tinieblas sobre toda la tierra». La hora sexta correspondería aproximadamente a las 12 del mediodía, y la hora novena a las 3 de la tarde.
Este momento de oscuridad se ha interpretado de diferentes maneras. Algunos lo ven como un signo de la ira de Dios ante la crucifixión de su Hijo. Otros lo interpretan como una señal del dolor y la tristeza que sintió la creación entera ante la muerte de Jesús.
En cualquier caso, la Hora Tercera se ha convertido en un momento simbólico de la pasión de Cristo.
En la liturgia católica, se recuerda este momento con una oración especial llamada «La Hora Tercera», que se reza a las 3 de la tarde.
La Hora Tercera y el Espíritu Santo
En el libro de los Hechos de los Apóstoles, se describe cómo los discípulos de Jesús recibieron el Espíritu Santo en el día de Pentecostés. Este evento tuvo lugar a la Hora Tercera del día.
Este momento se ha interpretado como una señal de que el Espíritu Santo es el que da vida a la Iglesia y la guía en su misión de llevar el mensaje de Cristo al mundo. En la liturgia católica, se recuerda este momento con una oración especial llamada «La Hora Tercera del Espíritu Santo».
La Hora Tercera y la Resurrección de Jesús
En el libro de los Hechos de los Apóstoles, se describe cómo Pedro y Juan sanaron a un hombre cojo en el Templo de Jerusalén. Este milagro tuvo lugar a la Hora Nona del día, que correspondería aproximadamente a las 3 de la tarde.
Este momento se ha interpretado como una señal de que la Resurrección de Jesús es la fuente de todo poder y autoridad en la Iglesia. En la liturgia católica, se recuerda este momento con una oración especial llamada «La Hora Nona de la Resurrección».
La Hora Tercera es un momento simbólico de la pasión de Cristo que se ha interpretado de diferentes maneras a lo largo de la historia. Se la ha asociado con el Espíritu Santo y la Resurrección de Jesús, lo que refleja la importancia que tiene en la teología cristiana.
La Hora Tercera es un recordatorio de la presencia de Dios en nuestras vidas y de su amor por nosotros, que se manifestó de manera especial en la vida, muerte y resurrección de Jesús.