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Míriam (Hermana de Moisés y Aarón)

Míriam: La Hermana de Moisés y Aarón

La historia bíblica nos presenta a Míriam como una figura clave en el contexto del antiguo pueblo de Israel y en la historia de la liberación que Dios llevó a cabo a través de su siervo Moisés. Míriam fue la hermana mayor de Moisés y Aarón, y desempeñó un papel significativo en la vida del pueblo de Israel durante su travesía por el desierto.

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El Nacimiento y la Protección Divina

Míriam nació en Egipto, en un periodo en el que los hijos varones de los israelitas eran condenados a la muerte por el faraón debido a su temor de que los israelitas se hicieran demasiado numerosos y poderosos. Sin embargo, Dios tuvo un plan para Míriam y su familia. Su madre, Joquebed, escondió a Moisés al nacer y Míriam fue una pieza fundamental en la protección y cuidado del niño.

La Profetisa y la Celebración de la Liberación

En su papel de profetisa, Míriam fue una portavoz de Dios para el pueblo de Israel. En el libro del Éxodo, vemos cómo lideró a las mujeres que, con danzas y tambores, celebraron la liberación de la esclavitud en Egipto tras la apertura del Mar Rojo. Míriam alabó a Dios por su poder y gracia al salvar al pueblo de Israel.

La Caída en la Murmuración

A pesar de su importante papel, Míriam también es recordada por un episodio de rebeldía y consecuente castigo divino. En el libro de Números, se nos cuenta que Míriam y Aarón cuestionaron la autoridad de Moisés, lo cual desagradó a Dios. Como consecuencia, Míriam fue castigada con lepra durante siete días hasta que Moisés intercedió por su sanidad.

La Muerte y el Legado

La Biblia no menciona muchos más detalles sobre la vida de Míriam después de este incidente. Sabemos que falleció en el desierto de Zin, antes de que el pueblo de Israel entrara en la tierra prometida. Su muerte marcó el fin de una era, pero su legado como líder y profetisa perduró en la memoria del pueblo de Israel.

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En resumen, Míriam fue una figura importante en la historia bíblica. Su papel como hermana de Moisés y Aarón, su protección divina al nacer y su liderazgo en la celebración de la liberación del pueblo de Israel son aspectos que destacan su papel en la historia del antiguo pueblo de Dios. Sin embargo, también nos muestra la importancia de obedecer y respetar la autoridad establecida por Dios.